SI MARCA ISCO NO HAY DERROTA
Lleva 35 goles como profesional y nunca perdió cuando logró mojar: 24 victorias y tres empates. También es clave en defensa: robaba 3,9 balones de media y ahora, 5,3.
Isco sigue siendo la luz que guía al Real Madrid esta temporada. Se
ha afianzado definitivamente en el once de Ancelotti. Por eso, juegue de
inicio o como revulsivo, es uno de los preferidos del técnico italiano:
ya es el jugador que ha participado en más partidos de Liga, 21, junto a
Casillas y Benzema. El malagueño fue anoche titular de nuevo ante el
Deportivo y fue otra vez el mejor jugador del equipo.
Lo dice la valoración general de todas las crónicas y lo demuestra el
afecto del Bernabéu hacia el centrocampista. Fue uno de los más (y
pocos) aplaudidos al recitarse su nombre por megafonía antes de empezar
(pese a la derrota en el derbi) y se fue ovacionado cuando fue
sustituido en el 79’. Su gol de rosca,
marca de la casa, encarriló la victoria. Y su trabajo encandiló al
madridismo. A pocos jugadores les cantan tantas veces como a él.
Y es que Isco se lo está ganando. Sus números hablan de una clara madurez. En ataque lleva ya cinco goles esta temporada (su mejor registro está en 12 en la 2012-13). Pero donde sobre todo es clave es a la hora de dar asistencias. Ya lleva 12 en 2.370 minutos, cuando su techo estaba en las 9 que dio el curso pasado. Se siente importante y se atreve a hacer cosas. Y en defensa, algo que antes le restaba potencial, ahora contribuye con una mejoría notable: ha pasado de robar 3,9 balones la temporada pasada a los 5,3 de esta. Durante muchas jornadas ha sido el jugador que más balones recuperó, animando a Ancelotti a utilizarlo incluso como mediocentro cuando ha sido necesario. Es fundamental para compensar el 4-3-3 en ataque y convertirlo en un 4-4-2 en defensa.
Puede decirse, además, que Isco ya es un pilar en este Madrid. E incluso talismán. Siempre lo fue allá donde estuvo. En sus 176 partidos como profesional (Valencia, Málaga y Madrid) lleva 35 goles con el logrado anoche y siempre que moja, su equipo empata o gana. Nunca pierde. Isco puede presumir de un balance de 24 victorias y 3 empates en total cuando moja. 25 de esos goles los hizo en 126 partidos en Primera (11 con el Málaga y 14 con el Madrid). Otros seis los logró en 27 partidos de Champions (3 con el Málaga y 3 con el Madrid). Tres más en 17 partidos de Copa (2 con el Valencia y 1 con el Madrid). Y otro en dos partidos jugados del Mundialito de Clubes. A eso se le llama ser decisivo.
Por este gran estado de forma, Ancelotti volvió a piropearle ayer ante los medios tras la victoria frente al Depor. “Sigue en un gran momento y tenemos que disfrutar con él”. Isco también se mostró muy satisfecho por cómo le están saliendo las cosas: “Siempre me cantan, intento ganármelo en el campo haciendo todo lo que puedo. Yo agradezco a la afición la fuerza que me dan con esos cánticos”. Próxima reto, Schalke.
Y es que Isco se lo está ganando. Sus números hablan de una clara madurez. En ataque lleva ya cinco goles esta temporada (su mejor registro está en 12 en la 2012-13). Pero donde sobre todo es clave es a la hora de dar asistencias. Ya lleva 12 en 2.370 minutos, cuando su techo estaba en las 9 que dio el curso pasado. Se siente importante y se atreve a hacer cosas. Y en defensa, algo que antes le restaba potencial, ahora contribuye con una mejoría notable: ha pasado de robar 3,9 balones la temporada pasada a los 5,3 de esta. Durante muchas jornadas ha sido el jugador que más balones recuperó, animando a Ancelotti a utilizarlo incluso como mediocentro cuando ha sido necesario. Es fundamental para compensar el 4-3-3 en ataque y convertirlo en un 4-4-2 en defensa.
Puede decirse, además, que Isco ya es un pilar en este Madrid. E incluso talismán. Siempre lo fue allá donde estuvo. En sus 176 partidos como profesional (Valencia, Málaga y Madrid) lleva 35 goles con el logrado anoche y siempre que moja, su equipo empata o gana. Nunca pierde. Isco puede presumir de un balance de 24 victorias y 3 empates en total cuando moja. 25 de esos goles los hizo en 126 partidos en Primera (11 con el Málaga y 14 con el Madrid). Otros seis los logró en 27 partidos de Champions (3 con el Málaga y 3 con el Madrid). Tres más en 17 partidos de Copa (2 con el Valencia y 1 con el Madrid). Y otro en dos partidos jugados del Mundialito de Clubes. A eso se le llama ser decisivo.
Por este gran estado de forma, Ancelotti volvió a piropearle ayer ante los medios tras la victoria frente al Depor. “Sigue en un gran momento y tenemos que disfrutar con él”. Isco también se mostró muy satisfecho por cómo le están saliendo las cosas: “Siempre me cantan, intento ganármelo en el campo haciendo todo lo que puedo. Yo agradezco a la afición la fuerza que me dan con esos cánticos”. Próxima reto, Schalke.
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