domingo, 31 de agosto de 2014

LA VOZ DE IBIZA


VACIO EL PARKING DE PERSONAL DEL HOSPITAL MIENTRAS LOS USUARIOS SE DESAPARECEN

Familiares de enfermos exigen que el P3 no sea de uso exclusivo para los trabajadores de Can Misses

31.08.2014 | 05:30
La zona de aparcamiento restringida a trabajadores, ayer por la mañana, prácticamente vacía.
La zona de aparcamiento restringida a trabajadores, ayer por la mañana, prácticamente vacía. 
Las once y media de la mañana del sábado. La vista de la habitación 129 del hospital Can Misses no engaña: el aparcamiento para personal del Área de Salud de Ibiza y Formentera está prácticamente vacío. Los familiares y amigos de los pacientes ingresados en varias de las camas con vistas al parking resoplan cada vez que miran por las ventanas.
«Todas esas plazas vacías y nosotros teniendo que dar mil vueltas para poder aparcar», comenta Fátima, que explica que ha estado veinte minutos al volante hasta que ha encontrado una plaza en la bajada de la calle Corona. Podría haber entrado en el aparcamiento de pago, pero se niega. «Hace una semana que vengo todos los días, mañana, mediodía y noche. Si tuviera que pagar, ya me habría dejado medio sueldo», justifica volviendo a mirar por la ventana y frunciendo el ceño.
La zona reservada para los trabajadores del hospital es la que se encuentra más cercana al edificio viejo, donde aún están la mayoría de los servicios sanitarios. El Área de Salud de Ibiza y Formentera ha justificado en varias ocasiones que se ha destinado el P3 al personal porque es el que se encuentra más alejado del nuevo hospital, de manera que cuando las instalaciones funcionen al cien por cien serán los usuarios y pacientes los que puedan dejar sus vehículos más cerca de las consultas y las habitaciones. Los usuarios coinciden: hay que abrir el P3 a todo el mundo. Sobre si los trabajadores deben o no tener el aparcamiento gratis las opiniones son más divergentes.
Ayer, a las once y media de la mañana, únicamente estaban ocupadas 108 de las 296 plazas. Es decir, que había 188 espacios libres para estacionar (además de las nueve plazas para personas con discapacidad) mientras los usuarios no dejaban de dar vueltas para encontrar un aparcamiento.
«No me importa pagar. Quiero decir, me molesta que se aprovechen de los que no tenemos más remedio que venir al hospital, pero si hay que pagar, se paga. Lo que me molesta de verdad que es tengamos que pagar por dejar el coche lejos. Para eso, lo aparco en la piscina», comenta Félix, que tiene a su madre ingresada y lleva cuatro días entrando y saliendo de Can Misses a todas horas.
Seis euros en una mañana
En estos cuatro días sólo ha utilizado el aparcamiento de pago el miércoles por la mañana, cuando le llamaron avisándole de que su madre estaba muy grave en urgencias. «En ese momento, ni lo pensé, entré directamente al parking. Se aprovechan de la situación», denuncia. Esa mañana pagó más de seis euros. Cuando trasladaron a su madre a una habitación sacó el vehículo del aparcamiento y lo trasladó a la zona de las instalaciones deportivas. Ayer tuvo suerte. Pudo dejarlo en el P4, la zona de aparcamiento situada detrás de la cafetería y que, de momento, continúa siendo gratuita.
Sorprende encontrar un cajero para pagar en el espacio restringido a los trabajadores, que no tienen que pagar por estacionar siempre que lo hagan en el P3. Los cajeros del P1 y el P2, en los que todos los usuarios tienen que abonar el aparcamiento a 2,10 euros la hora (una tarifa que los usuarios califican de «abusiva» y que supera las de la zona azul de la isla, casi todos los aparcamientos privados y es un 34% más que la del hospital de Son Espases, en Mallorca) no funcionan correctamente. A pesar de que la gerencia del Área de Salud exigió a la concesionaria (Gran Hospital Can Misses, que ha subcontratado la gestión del parking a Cp-Plus) que ofreciera un buen servicio, sólo es posible pagar en efectivo.
Si un usuario no lleva suficiente dinero no tiene la posibilidad de pagar con tarjeta, de manera que tiene que desplazarse hasta el cajero que se encuentra junto a la cafetería y sacar dinero. Esto sumará varios minutos al coste total y además, en el caso de que la persona no sea cliente de la caja a la que corresponde el cajero, la comisión correspondiente. Lo que viene a ser un buen pico más.
A media mañana del sábado, las zonas P2 y P1 están vacías. No hay ni un coche en ninguna de las plazas de pago. Seguramente, si los conductores pudieran aparcar en alguna de las reservadas a los trabajadores, aunque fuera pagando, lo harían. Decenas de vehículos intentan entrar a la zona reservada. Al toparse con la barrera no les queda más remedio que dar marcha atrás y continuar calle arriba. La maniobra, un cambio de sentido, está explícitamente prohibida por una señal de tráfico. Sin embargo, nada en el desvío que da acceso al aparcamiento exclusivo del personal alerta de que ese carril únicamente deben usarlo los que tengan acceso a ese parking. Además de prohibida, es peligrosa, ya que muchos de los vehículos que circulan por la calle Corona lo hacen a toda velocidad.
Al llegar a la barrera, los conductores que desconocen la situación actual del aparcamiento del hospital no entienden qué ocurre. Desde ese acceso no se ve ningún letrero que informe de que es exclusivo para el personal. Un cartel azul está entre los barrotes amarillos de la entrada, que tapan las letras, y otro está pegado en la pared, a la derecha, de manera que el conductor únicamente lo descubre cuando, harto de que no se levante la barrera, mira en todas direcciones buscando una explicación. En el interfono, los responsables de la empresa que gestiona el parking, han colocado un folio en el que se lee «solo personal».
Ayer por la mañana, alrededor de las doce, la barrera de salida de esta zona restringida se quedó levantada, opción que aprovecharon varios conductores para estacionar en ella. Algunos, al darse cuenta de que se trataba de un error, volvieron a salir. Otros, sin embargo, decidieron aprovechar. ¿Y salir? «Si han cerrado pediré que me levanten la barrera, si tengo que pagar, ya pagaré, pero voy a estar solo diez minutos», confesaba una conductora, pillada infraganti, que también se sorprendió al ver las vallas de plástico con las que han cerrado algunos de los carriles de este espacio para evitar colisiones al confundir el sentido de la marcha de algunos de ellos.
En las paredes del hospital y en el camino hasta la zona deportiva, muy ocupada a pesar de ser fin de semana, proliferan desde que se abrió el aparcamiento de pago decenas de anuncios de alquileres de parking en los edificios de la zona. Muchos de ellos con casi todas las tiras arrancadas.

LA VERDAD

UN JOVEN QUE TRIPLICABA LA TASA DE ALCOHOL SUFRE UN ACCIDENTE EN EL CENTRO DE CASCO URBANO
Estado en que quedó el automóvil en el solar en el que acabó.
Estado en que quedó el automóvil en el solar en el que acabó. / Moreno
  • control del turismo en la madrugada del sábado y resultó herido en la cabeza

Un joven de 23 años de edad, vecino de Blanca, resultó herido al sufrir un accidente de tráfico en la avenida de La Constitución. Tras someterse a la prueba de alcoholemia, practicada por la Policía Local de Abarán, dio un resultado positivo de 0,75 miligramos por litro, el triple del máximo permitido, por lo fue imputado como presunto autor de un delito contra la seguridad vial.

El conductor, que iba solo, presentó una herida en la cabeza. Fue atendido por el personal del centro urgencias de Abarán, que le practicó varios puntos de sutura.El suceso ocurrió en la madrugada del sábado. El turismo, un citroen ZX, por causas que no han trascendido, se salió de la calzada y, tras salvar la acera y llevarse por delante parte del cercado de un terreno situado en el antiguo recinto ferial, acabó en un descampado junto al colegio Virgen del Oro, no sin antes sufrir importantes daños materiales que han dejado el turismo prácticamente inservible.

IDEAL.ES

LOCALIZAN  EN HOSPITAL DE MALAGA AL BRITANICO CON UN TUMOR
Foto distribuída por la Interpo
Foto distribuída por la Interpo / RC
  •  padres, ambos testigos de Jehová, sacaron al menor sin consentimiento médico del hospital donde estaba ingresado

Ashya King, el niño británico de cinco años que padece un tumor cerebral y que hace unos días fue sacado de un hospital londinense por sus padres sin consentimiento médico, ambos testigos de Jehová, fue localizado anoche en un hostal de Benajarafe, en el término municipal de Vélez-Málaga. El menor fue trasladado de urgencia en ambulancia al hospital Materno Infantil, mientras que los progenitores fueron detenidos y trasladados por agentes de la Policía Nacional a la Comisaría de Vélez-Málaga por impedir un tratamiento médico que pudiera salvarle la vida, según confirmaron fuentes policiales.
Tras la huida de la familia, la policía puso el foco de la investigación sobre el territorio español, en concreto en la Costa del Sol occidental, donde el matrimonio King había pasado largas temporadas y punto geográfico con el que mantienen lazos, tanto empresariales como familiares. Según pudo confirmar SUR, la familia cuenta con un piso en la urbanización Casares del Mar, un conjunto de bloques de apartamentos a 10 kilómetros de Estepona, a 50 metros de la playa y con vistas a Gibraltar y Marruecos. Una patrulla de la Guardia Civil estuvo custodiando la entrada durante toda la jornada de ayer.
Sin embargo, finalmente fue en la zona oriental donde se les localizó después de que los padres, Brett y Nagemeh King, acompañados del pequeño enfermo y sus cinco hermanos, se registraran por la tarde en el hostal La Esperanza de Benajarafe. La recepcionista que los atendio, Ilia Pardo, explicó anoche que fue uno de los hijos adultos del matrimonio, Dany King, de 22 años, quien realizó la reserva a su nombre, de dos habitaciones dobles. «La familia estaba esperando en el coche. Como no había aparcamiento dentro, salí a indicarles dónde podían dejar el coche. Al ver la matrícula inglesa me puse nerviosa, porque hacía pocos minutos que había visto la noticia en SUR Digital», confesó la recepcionista, de 23 años.
«Hemos tenido todo el día el ordenador roto, así que no había podido pasar los datos de la reserva a la Policía Nacional, como estamos obligados a hacer todos los alojamientos turísticos. Pero avisé a mi jefe para que llamara a la Policía, ya que pensé que podían ser la familia fugada de Londres», continuó Pardo. «He hecho lo que debía, luego ha venido uno de los hijos a recriminarme que porqué hemos llamado a la Policía», dijo.
A los pocos minutos se desplazaron hasta el establecimiento hotelero, situado a pie de la antigua N-340, varias patrullas de la Policía Nacional, así como una ambulancia del 061. Tras comprobar que se trataba de los progenitores del niño buscado por la Interpol y con una Orden Europea de Detención y Entrega (OED) dictada por las autoridades británicas, acusados de un presunto delito de crueldad contra una persona menor de 16 años, tal y como recoge el ordenamiento jurídico del país. «Los médicos han sacado al niño en brazos, se le veía muy débil, como dormido», detalló la empleada del hostal. Uno de los otros hijos, mayor de edad, se quedó a cargo de sus otros hermanos, al parecer cuatro, en una habitación del hostal, que dispone de 35 habitaciones y que está lleno.
«Fue casualidad que hubiera dos habitaciones dobles libres, ya que este fin de semana estamos a tope con los participantes en una concentración de motos», añadió Pardo. Ashya King sufre un tumor cerebral que le impide hablar, moverse y alimentarse por sí mismo. Se encontraba ingresado en el hospital de Southamton, hasta que sus padres lo sacaron del centro sin consentimiento médico.
La preocupación por su estado iba en aumento a medida que pasaban las horas puesto que Ashya estaba conectado a una máquina de alimentación con una batería difícil de cambiar sin ayuda de los especialistas y de vida muy breve, diseñada para servir de apoyo cuando el paciente se encuentra desconectado temporalmente de la maquinaria principal.

sábado, 30 de agosto de 2014

IDEAL.ES

EL CARBURANTE MAS BARATO DE ANDALUCIA ESTA EN GRANADA

Una trabajadora de una estación de servicio llena el depósito de un coche en Motril
Una trabajadora de una estación de servicio llena el depósito de un coche en Motril / JAVIER MARTÍN
  • provincia granadina se sitúa en la media española, pero los precios en Málaga, Cádiz y Sevilla son más elevados

Málaga es la provincia andaluza con los carburantes de automoción más caros de Andalucía, con 1,458 y 1,344 euros el litro de gasolina de 95 octanos y de gasóleo, respectivamente, frente a Granada, donde cuestan 1,448 y 1,318 euros, según datos del Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
Jaén, Cádiz y Sevilla siguen a Málaga como provincias andaluzas con un carburante de automoción más caro, mientras que los precios de estos combustibles son más asequibles, además de en Granada, en Almería, Huelva y Córdoba.
Málaga es la tercera provincia española con los precios de carburante para locomoción más caros, sólo superada por Orense y por Baleares, mientras que Granada se sitúa en la media española, con una veintena de provincias con carburantes más baratos.
Las provincias de Huesca, Navarra y Zaragoza tienen los carburantes de automoción más baratos de España -con la excepción de Canarias, por su diferente fiscalidad-, mientras que Baleares y Orense se mantienen como las más caras, según datos del Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
En julio, el precio medio de un litro de gasolina en España era de 1,44 euros y el de gasóleo, de 1,33 euros, ambos por debajo de la media europea -1,61 euros y 1,39 euros, respectivamente-.
Los precios medios mensuales correspondientes a julio vuelven a mostrar que las regiones que no aplican la parte autonómica del impuesto de hidrocarburos -Aragón, La Rioja, Navarra y el País Vasco- tienen los carburantes más baratos.
Así, Huesca, Navarra y Zaragoza tienen la gasolina más barata de España -1,389 euros, 1,391 euros y 1,403 euros, respectivamente- y también los menores precios en el gasóleo -1,276 euros, 1,271 euros y 1,286 euros-.
Sin embargo, como ha subrayado en varias ocasiones la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), las estaciones de servicio ubicadas en las comunidades de menor presión fiscal a menudo aprovechan esta diferencia para fijar unos precios más elevados y aumentar así su beneficio.
De esta manera, en los datos de julio se observa que, tanto en gasolina como en gasóleo, Madrid tiene unos precios inferiores a Guipúzcoa, a pesar de que aplica un tramo autonómico del impuesto de hidrocarburos de 17 euros por cada 1.000 litros y en la provincia vasca es cero.
En el otro extremo de la tabla, Baleares se mantiene como la provincia con carburantes más caros -1,487 euros la gasolina y 1,38 euros el gasóleo-, seguida de cerca por Orense, con 1,461 euros y 1,375 euros, respectivamente.

En el caso de los gasóleos, los más caros están en el Reino Unido (1,71 euros) e Italia (1,64 euros), frente a los 1,2 euros de Luxemburgo y los 1,27 euros de Estonia.Mientras tanto, en Europa, las gasolinas más caras se encuentran en Italia y Holanda, por encima de los 1,7 euros, y las más baratas, en Polonia y Estonia, alrededor de 1,32 euros el litro.
A continuación se adjunta un cuadro con los precios medios correspondientes a julio de la gasolina de 95 octanos y el gasóleo de automoción, expresados en euros, por provincias:
PROVINCIA GASOLINA GASOLEO
Granada 1,445 1,318
Almería 1,448 1,324
Huelva 1,451 1,330
Córdoba 1,451 1,334
Sevilla 1,452 1,332
Cádiz 1,454 1,340
Jaén 1,454 1,337
Málaga 1,458 1,344

LA VOZ DE IBIZA


FALLECE LA CONDUCTORA DEL COCHE QUE VOLCÓ EN UN CANAL

Era una trabajadora de un establecimiento del Parque de ses Salines, española de origen argentino de 36 años

30.08.2014 | 12:38
Una grúa pluma se lleva el coche de la mujer que resultó herida muy grave.
Una grúa pluma se lleva el coche de la mujer que resultó herida muy grave. 
­La conductora del coche que volcó el viernes en un canal de la carretera de es Cavallet ha fallecido esta madrugada, según ha confirmado una portavoz del Ib-Salut. La mujer estaba ingresada muy grave en la unidad de cuidados intensivos (UCI) del hospital Can Misses, y era una trabajadora de un establecimiento comercial de la zona, argentina nacionalizada española de 36 años de edad.
La mujer conducía, sola en el vehículo, un Volkswagen Golf azul oscuro, en dirección a Sant Jordi. Por motivos que se desconocen, comenzó a zigzaguear, el coche hizo un trompo y volcó, según ha podido saber este diario. Las circunstancias concretas del siniestro las tendrá que determinar la Policía Local de Sant Josep después de la investigación.
El turismo quedó semihundido boca abajo en la acequia situada a la derecha del camino, mirando hacia Sant Jordi, con la mujer atrapada debajo del agua y el fango durante alrededor de 20 minutos.
Los vecinos dieron la alarma
Vecinos de la zona, que escucharon un fuerte golpe, salieron rápidamente de sus casas y avisaron a los servicios de emergencia. Hasta el lugar del suceso, a unos 200 metros del cruce de la carretera, se desplazaron al menos dos ambulancias, patrullas de la Policía Local de Sant Josep y los bomberos, según explicaron varios testigos y los profesionales del parque insular de la autovía de Sant Antoni.
El rescate fue muy complejo. Un médico no se lo pensó dos veces, se metió en la acequia y después se subió encima del coche, mientras varios bomberos también se introducían en el canal, por el que discurre una maloliente mezcla de agua y fango.
Rescate bajo el agua
Desde el camino solo se observaban las dos ruedas traseras y la mitad de la delantera que sobresalían. Los profesionales trabajaron a ciegas, puesto que la visión era casi nula bajo el agua y el fango. Además, desconocían cuántas personas había dentro del vehículo. Consiguieron forzar una pequeña apertura, de unos 30 centímetros, en la puerta del conductor, y palparon un brazo. Cortaron el cinturón y rescataron a la única ocupante del vehículo.
Los sanitarios desplazados en una ambulancia de soporte vital avanzado (SVA) tipo UVI móvil practicaron maniobras de reanimación a la herida, que se encontraba en parada cardiorrespiratoria, y la trasladaron al hospital. El primer parte médico facilitado por el 061 indicaba que su estado era crítico.
En la zona se vivieron momentos de mucha tensión, puesto que alguien avisó a la pareja de la accidentada, que observó el rescate. El hombre estaba muy nervioso, según explicaron algunos testigos.
Los médicos consiguieron mantener con vida a la mujer. Mientras tanto, los bomberos continuaban sumergidos, con barro y agua hasta el pecho. Utilizaron pértigas con ganchos para peinar el canal. «No sabíamos si encontraríamos más cuerpos dentro», explicó uno de los cinco profesionales desplazados en un camión tipo Bomba Urbana Pesada (BUP).
«Ha sido una actuación muy dura», apuntó el cabo, que recordó que recibieron el aviso a las ocho en punto de la mañana, justo en el momento en el que entraban en el parque para comenzar su guardia de 24 horas seguidas de trabajo.
Una grúa pluma se encargó de retirar el coche, mientras otras dos rescataban otros dos vehículos que también habían caído a los estanques del camino de es Cavallet ayer por la mañana en el mismo lapso de tiempo, entre las siete y media y las ocho de la mañana. Al parecer, los tres accidentes no guardan relación entre ellos, a falta de la investigación policial. Los otros dos coches accidentados fueron un pequeño turismo marca Smart que cayó (en el lado opuesto al del Volkswagen Golf) y que volcó en una curva cerrada, y otra furgoneta, de la marca alemana, que también sufrió un accidente cerca. En el primer vehículo viajaba una joven italiana y en el segundo una pareja de españoles, que no precisaron atención médica, según explicaron testigos presenciales.
La Policía Local de Sant Josep cortó el tráfico durante casi una hora, lo que provocó retenciones. Además, se concentraron numerosos curiosos.