CADIZ DIGITAL
DOS AÑOS PARA EL NUEVO PUERTO
La construcción de la futura terminal de contenedores del Puerto de Cádiz no es comparable en impacto, popularidad ni visibilidad con el segundo puente, pero es un ejemplo más de lo costoso que resulta para esta ciudad sacar adelante un proyecto clave para el desarrollo estratégico y económico. Al rosario de inconvenientes que acumula el trámite de la subvención que ha de aprobar aún el Colegio de Comisario de la Unión Europea, se han sumado los escollos propios de ahondar en los terrenos de una cultura trimilenaria, con el hallazgo de nada menos que tres pecios (el último, aún sin rescatar), que no sólo han mermado las arcas de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) sino que han forzado la marcha de las obras, cuya terminación está prevista para finales de 2015.
Pero todos estos obstáculos no preocupan ya al exdirector técnico del Puerto de Cádiz, Albino Pardo, en el momento de su jubilación. Tras quince años haciendo realidad los proyectos portuarios gaditanos, Pardo asegura que el reto ahora, una vez que da por finalizadas las obras de la terminal de contenedores para 2015 (según lo previsto), es ponerla en explotación. Asegura que por mucho que se agilicen los trámites; la búsqueda, posterior concurso, más la última obra que ha de realizar la firma concesionaria, y que sería la pavimentación del suelo, transcurrirán, al menos, dos años más. «Firmaría ahora mismo que la terminal de contenedores estuviese operativa para principios de 2017», asegura el director técnico.
Es imposible que en estos momentos se haya buscado un operador para la gestión de la terminal. Una vez puesto el último ladrillo tendrá que publicarse un concurso público, pero lo que más preocupa al técnico no son los trámites sino que la viabilidad del proyecto «ilusione a un operador, porque tampoco hay tantos». Es especialmente difícil encontrar firmas dedicadas a la explotación de terminales públicas, como la que plantea el Puerto de Cádiz, ya que han de gestionar la actividad de varias navieras o armadores. Un ejemplo de estos operadores podría ser el Grupo Pérez y Cía., que es un viejo conocido en los muelles gaditanos, además de ser el accionista de referencia del Grupo TCB, principal operador de terminales portuarias de España.
Es crucial que la firma que gestione la terminal gaditana tenga buenos contactos internacionales, como los del Grupo TCB, que opera a escala mundial (en el Océano Pacífico, América, el Mar Egeo, etc). Según explicó Pardo, la importancia geostratégica de la terminal gaditana radica en ser puerto intermedio entre el destino final de la mercancía y la línea «casi ecuatorial», ya que las grandes navieras son reacias a desviarse mucho de las dos o tres rutas mundiales más transitadas.
De cualquier forma, habrá que encontrar un operador interesado y según apuntó Albino Pardo, no será tampoco tarea fácil para la actual dirección de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz. «Será complicado porque le daremos el muelle construido pero la operadora deberá realizar una importante inversión para la pavimentación de la terminal y la puesta en marcha de la maquinaria», apuntó el que ha sido director del Puerto hasta el pasado mes de agosto.
El técnico confía en que el mercado de grúas de segunda mano, facilite la inversión que ha de hacerse en la terminal gaditana. Como ejemplo, en los últimos meses, el Puerto de Algeciras ha tenido que recrecer todas su grúas para adaptarse al enorme tamaño de los nuevos buques, que ahora están realizando los itinerarios más largos. En cualquier caso, la nueva terminal de contenedores será otra infraestructura más que los gaditanos tardarán en ver.
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